sábado, 31 de marzo de 2012

Qué error, qué inmenso error.



Tal como advertíamos el año pasado http://nuncaestardesilachicallega.blogspot.com.es/2011/03/el-gobierno-tiene-un-plan.html, se ha consumado la amnistía fiscal encubierta.
Pero el Gobierno se equivoca de Finisterre a cabo de Gata si cree que los acuadalados españoles van a  entregarle sus ahorros, con tanto esfuerzo ocultados, a cambio de un quítame allá un diez por ciento. Los tienen a buen recaudo, los utilizan cuando quieren en su maraña de empresas interpuestas y sus hombres-paja y no van a ser tan panolis de entregarlos con recargo. No y no. Tienen todo el derecho a que se les abonen los gastos que les ha originado la operación de ida; asesoramiento jurídico, pagos varios a camellos telemáticos o físicos y el desgaste psicológico que supone todo ello. El Gobierno debería ABONAR todos los gastos ocasionados a esas grandes fortunas por el esfuerzo de ocultar el dinero, si quiere recuperarlo.

Habrase visto la desfachatez del Gobierno.

Orense a tantos de tantos.

viernes, 23 de marzo de 2012

La venganza de San Pedro.

                                 

Cuando los miembros de la Benemérita de Verín prendieron hace unos días a Raúl  P. S de 22 años, se sorprendieron de las facilidades que éste les concedió para su detención, como si lo estuviera deseando.

En el mes de dicciembre pasado, Raúl, en un acto de religiosidad sin precedentes a las dos de la madrugada, entró en la Iglesia parroquial de Santa María de Soutechao, en Vilardevós. Empujado por un irrefrenable sentimiento religioso y porque no  tenía llave de la Iglesia, se vio obligado a usar la fuerza para desahogar sus penas en el altar mayor. Una vez dentro, se fijó en una hermosa talla de San Pedro, que le miraba con ojos vidriosos y llenos de animadversión; haciendo caso omiso de la severa mirada, tomó la talla y salió de la Iglesia protegiéndola debajo de la chaqueta ; era invierno y helaba. Hace unos días,tres meses más tarde, apareció entre unos tojos y Raúl, con el alma destrozada se entregó a la Tercera compañía de la Guardia Civil de Verín. Al ser interrogado se vino abajo a la primera: " Estaba deseando entregar al San Pedro; desde que lo tengo, tuve un accidente de coche, perdí el trabajo, me dejó la novia y hace unos días me corté dos tendones. Este tío me miró mal."
No quiero yo defender al pobre Raúl, pero me parece a mí que San Pedro podría buscarse un enemigo de su talla.
Dice el paisano que encontró la imagen, que notó en sus ojos una sonrisa de satisfacción. Si va a resultar que incluso los santos son vengativos.


Orense a tantos de tantos.

lunes, 19 de marzo de 2012

Dios existe.


No dispongo de ninguna foto de Dios; no obstante pretendo que al final de estas veintisiete líneas quede demostrada, sin una pizca de duda, su existencia. Me apoyaré para ello en las palabras de sabios contemporáneos, sobre todo en las de mi abuelo materno, un sabio analfabeto.
Nada de lo que pasa puede ser casual. Todo ha de responder a una estrategia bien definida por quien pueda definirla. No se puede haber pasado de la más exuberante abundancia a la miseria en que nos disponemos a vivir, en tan poco espacio de tiempo;  eso sólo ocurre si Dios lo quiere y si no hacemos las cosas como Dios manda. Es fácil dar el paso de la nada a la más absoluta miseria, pero esto que nos está ocurriendo no, por Dios! Empezamos por tanto a adivinar la existencia de Dios. Ya lo hemos mencionado cinco veces.Nadie que no fuese Dios podría aunar tantos esfuerzos para que la gente trabaje  "por lo que le den", por lo mejor que dirían en bolsa, y en el peor de los casos se muera de hambre en el sentido más literal de la palabra. Nadie que no fuese un poder superior movería tan sabiamente los mercados para que confluyan justo en lo que dios quiere que confluyan: en enriquecer más a los más ricos y empobrecer más a los más  pobres. Sólo Dios puede permitir las guerras y sólo Dios puede permitir las guerras económicas que siempre acaban del mismo modo; fluyendo las riquezas atraídas por el imán de la riqueza.
Por todo ello, Dios tiene que existir.
Para mayor abundancia y cumpliendo mi promesa inicial, demostraré más allá de toda vacilación la existencia de Dios con una frase del sabio de mi abuelo materno: Non hay mais dios co diñeiro.
Es una frase suya con la que creo haber demostrado lo que pretendía.

En Orense a tantos de tantos, todavía.

sábado, 17 de marzo de 2012

Aniversario

 Para  consolarme del inexorable paso del tiempo, mi esposa me ha sorprendido la semana pasada con un "finde" en una paradisíaca isla Atlántica. Es una de esas islas que ha ido perdiendo el antiguo glamour a medida que se fue masificando, pero que está dotada de tal belleza que por mucho que lo intentan no consiguen ajarla.


No es mi intención limaros los dientes ensalzando las bondades del hotel, del circuito de agua ni de la  sorpresa final  que me tenía reservada mi esposa, en forma de masaje ejecutado por una profesional (del masaje), sino mostraros los encantos de Galicia y que podamos contar con vosotros y vuestros euros; si podéis que no sea en agosto.
Galicia os recompensará con virtudes que no se pueden pagar con dinero.




Capilla de la Isla.

La Isla es hermosa, pero mi opinión sobre la capilla no es del mismo tenor; antes bien pienso que es" la capilla más hortera de España entera." Tal vez sea eso lo que la hace tan visitada.
El Hotel ha tenido la deferencia de invitarnos por la noche a una copa de cava en el Casino y no desaprovechamos la ocasión para jugarnos un montón de dinero en las máquinas: exactamente diez euros.
El ambiente del Casino no es el que me imaginaba: señores en traje y damas de tiros largos, sino de jovenzuelos desaliñados con capucha y algunos en chándal que se jugaban el dinero apostando ,y perdiendo,compulsivamente a la ruleta.



El Gran Hotel.

El Hotel que nos acogió, no fue el Gran Hotel, es moderno y funcional. Dispone de Spa y las habitaciones son amplias y cómodas, con excelentes vistas a la Ría. El buffet completo y el servicio amable, sin excesos.
La mañana del domingo la pasamos en la Illa de Arousa. Teníamos la intención de comer en un lugar llamado Punta Cabalo, un faro en desuso que fue aprovechado para Restaurante y desde el que se tiene una vista completa de la Ría de Arousa. No podíamos pasar por la playa de la Lanzada sin pisar su fina arena aprovechando la bajura de la marea.

Playa de La Lanzada con visitantes inesperados.


                           
Faro y Restaurante Punta Cabalo.

Vistas desde el Faro.



 
Finalmente el Restaurante estaba cerrado y aprovechamos para  bordear la isla en un plácido paseo que  nos llevó desde el puerto hasta las múltiples calas que se pueden disfrutar a lo largo de la misma.


Puerto de la Illa de Arousa.



Existen en Villagarcía y por lo visto también en la Illa, antiguas construcciones de Indianos, emigrantes españoles que habiendo hecho fortuna en países del nuevo Mundo retornaban para disfrutar de ella en sus lugares de origen. Ignoro si esta lo es, pero tiene todos los atributos a la vista de la palmera del fondo,distintivo de aquellas construcciones, homenaje a los  lugares que les habían acogido.

Una vez que no pudimos almorzar en el lugar que habíamos elegido y abarrotado el restaurante del puerto, lo hicimos en uno de playa,poco íntimo y de recuerdo menor.

Un bonito fin de semana y en agradable compañía.


En Orense a tantos de tantos.